A DONDE VA EL HOMBRE CUANDO SE VUELVE ANCIANO

Las arrugas de la vejez, el amor y la indiferencia. Un espejo social en dos escenas

POESÍA

Margoth Parra Villa

1/9/19861 min leer

A serene landscape of Segovia, Antioquia, showcasing lush greenery and soft, natural light.
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CUADRO NO. 1

FAMILIA “DE BIEN”

Abuelo, ¿Por qué tienes tantas arruguitas en la cara?

-Hijo, pasó el tiempo, acarició mi piel mil veces

la tocó tanto hasta ranurarla

debilitarla y mancharla

y me convertí en anciano…

pero estoy contento

porque a mi lado está mi pasado

rejuvenecido en ti

porque mis callosas manos

tienen la dicha

de tocar tu frescura y disfrutarla

porque al acariciarte

recuerdo que existí…

Abue, entonces acaríciame poco

Jajaja…jajjajaja. Mua…mua…

CUADRO NO. 2

UNA CÉNTRICA CALLE…

Ay… ay… no me pegue…

-Párate de ahí, viejo inmundo…

¿No ves que tapas

la entrada de mi negocio?

Coge tus mugrosos plásticos

y vete de aquí…

Pronto vete… viejo apestoso…

Ay… ay… Espere señor

me duelen los huesos

tengo hambre

Y no sé adónde ir…

Ah ¿y qué quieres,

que te cargue piojoso?

¿O que te traiga el desayuno

a mi andén?

¿O quizás que te sobe

los mugrientos huesos?

Ay…Ay, espere Señor

Ya me voy…

Ay…Ay…

Mami, mami…

Asómate a la ventana

hay que sacar un viejo

que vino a dormir

a nuestro andén…

¿A dónde va el hombre

en su vejez?